“La
mayor parte de los hombres se queja de la maldad de la naturaleza, porque nos ha
engendrado para un tiempo tan breve y porque la vida corre tan veloz, tan
rápida que, si exceptuamos a unos pocos, a todos los demás les priva de ella en
el preciso momento en que se aprestan a vivirla” Séneca.
NUEVO
PASEO TURÍSTICO POR LA CAPITAL DE GUADALAJARA.
-Razón
tenía Séneca con su acertada afirmación. Por ello Cesar, te cuento, que después
de haber vivido muchos años al servicio de una empresa privada, en la etapa
final de mi vida y pasar a un retiro honorable, justifico el tiempo disfrutando de ciertas actuaciones que antes
no me era posible, pasando a la acción realizando otras actividades más acordes
con mi edad. Por ejemplo experimentar momentos idílicos con el estudio y
asistencia a diversos conciertos musicales que se me presentan. Acompañar a
personas mayores que yo, paliando su soledad manteniendo diálogo con ellas, que
agradecen infinitamente, dejando en mi ánimo rica sensación de paz y armonía.
-Paseos
por el campo, para que a cielo abierto y al aire libre el alma se levante y de
fuerzas, y especialmente realizando nuestros reiterados viajes por nuestra
querida provincia, en particular por la comarca de la Alcarria, la del Señorío
de Molina de Aragón, la serranía de la zona Norte, con su original arquitectura
negra y la de los pantanos, visitando lugares desconocidos para conocer gentes
diversas. Todo ello nos da vigor y levanta el espíritu, que aparta la tristeza
y el aburrimiento.
-Por ello ahora, después del tiempo que hemos retrasado nuestras salidas por los problemas de salud que he tenido, te propongo dar un paseo turístico por la capital y ver algunos monumentos que todavía teníamos pendientes de visitar, como por ejemplo el famoso fuerte de San Francisco con 824 años de historia.
-Así
es abuelo, que me alegra tu decisión, pues es un emblemático conjunto monumental
que tenía mucho interés en conocer desde hacía tiempo, cuando empecé mis
estudios de Turismo.
-Pues su historia comenzó en el año 1200, cuando doña Berenguela, señora de Guadalajara y madre de Fernando III “El Santo” hizo allí una casa para los caballeros del Temple, por lo que la Infanta Isabel, hija de Sancho IV, también Señora de Guadalajara, la cedió a principios del siglo XIV a la Orden Franciscana.
-Desde que la familia de los Mendoza se asentaron en Guadalajara en 1340 se convirtieron en protectores del convento. Pues la iglesia que allí existe había sido comenzada en 1309, y a través del tiempo esa ilustre familia fue protectora, especialmente por Don Pedro Gonzalez de Mendoza, conocido como Gran Cardenal de España, cuya estatua preside delante del histórico y emblemático palacio del Infantado, icono de la ciudad de Guadalajara. Tuvo un papel muy importante en la cultura de la segunda mitad del siglo XV, y sus obras se extendieron por todo el reino de Castilla. Especialmente en la provincia de Guadalajara.
-En el sigl0 XVIII el
convento estaba en pleno auge con 80 personas entre profesores y seminaristas;
empezando en 1808 su declive, ya que en julio los franceses ocuparon la ciudad
y expulsaron a los monjes y convirtieron el Fuerte en cuartel y centro militar
estratégico de Guadalajara al mando del general Hugo, padre del escritor Victor
Hugo, que vivió en Guadalajara. En retirada de los franceses, saquearon la
ciudad y el convento fue destrozado en gran parte, utilizando la iglesia como
cuadra, profanando los sarcófagos esparciendo los restos de la familia Mendoza,
que recogidos en varias urnas fueron llevados en 1859 al Panteón Ducal de Pastrana.
-Cuanto me alegra Cesar
tus conocimientos sobre la larga historia del Fuerte, y yo añado que en el año
1835, cuando la desamortización de Mendizábal fueron declarados Monumentos Nacionales la
Iglesia y el Panteón, que pasaron al Ministerio de la Guerra. En la actualidad
es propiedad el Ayuntamiento de Guadalajara; y en las naves existentes se ha
creado espacio para actividades socio-culturales.
-En la iglesia se
encontraron nueve cuadros del “Apostolado del Greco”, que se entregaron en 1941
al Museo del Prado.
Aquel sábado amaneció con
un cielo limpio de nubes y se apercibía un brillante sol, por lo que pronosticaban
nuestros personajes sería un día caluroso, finalizando el verano.
Después de desayunar,
partieron andando hasta el monumento que habían previsto visitar, pues
estaba ubicado cerca de su domicilio.
Estuvieron largo tiempo en
la visita y salieron encantados de cuanto por allí observaron, pues la Iglesia
del Convento de San Francisco, destruida y reconstruida varias veces a través
de su larga historia, conserva un tesoro poco conocido pero de gran valor
arquitectónico, pues bajo el ábside de estilo gótico se oculta el panteón de la
que fue ilustre familia Mendoza, realizado a semejanza del Panteón de los Reyes
de El Escorial.
Gracias al empeño del
Ayuntamiento y la financiación del programa económico “Uno por ciento cultural”
se ha podido recuperar y abrir al público esa
maravillosa obra patrimonio de todos.
Después enfilaron sus pasos, también a pie, hacia la Concatedral de Santa María de la Fuente, que se encuentra en la plaza del mismo nombre, y en unos treinta minutos estaban entrando en su interior. En primer lugar el abuelo Octavio, especialmente, dedico unos minutos de oración, dando gracias por haber recuperado la salud perdida tiempo atrás, pues como él dijo a su nieto que “Es de
La Iglesia se remonta a
finales del siglo XIII y principios del XIV. Se suceden tres estilos
principales: el mudéjar, que define las puertas de ladrillo, con arcos de
herradura y la torre, inicialmente exenta; el estilo renacentista incorporado a
principio del siglo XVI, en el pórtico, con característicos capiteles
alcarreños, y finalmente, el barroco en la bóveda interior.
En el interior, observaron nuestros personajes con mucha admiración, tres naves con arcos apuntados, se suceden las capillas, lápidas, altares y otras obras de arte, entre las que destaca el retablo policromado, que trazó fray Francisco Mir en 1624. También disfrutaron observando la grandeza de aquel histórico monumento que por dejadez lo habían olvidado.
Cercana estaba ubicada la famosa capilla llamada Luis de Lucena, en la cuesta de San Miguel, que sube desde el monumento que habían visitado hacia el centro de la ciudad. Se trata de uno de los edificios más interesantes de Guadalajara. Obra maestra de la arquitectura en ladrillo. Capilla funeraria de Luis de Lucena, también llamada de los Urbina o de nuestra Señora de los Angeles.
La capilla estuvo adosada
a la iglesia de San Miguel, ya desaparecida. Revela la tradición mudéjar en el
uso del ladrillo, pero su estilo caprichoso obedece al manierismo del siglo
XVI. Fue fundada por el humanista Luis de Lucena, y su construcción, tal vez
trazada por él mismo, data del 1540.
En el exterior de la
capilla, lucen unas torrecillas cilíndricas, bajo un extraño alero, simulando
una obra militar.
En el interior se exhibe
un estilo no menos caprichoso, que introducen una mezcla de dórico y jónico, y
en la tribuna que acoge la escalera de caracol que sube al piso posterior. Las
bóvedas pintadas se le atribuyen a Rómulo Cincinato, que también trabajó en el
Palacio del Infantado citado anteriormente.
La entrada a este edificio
como a la cripta de San Francisco es gratuita para menores de 12 años y
estudiantes que lo acrediten, para el resto, el coste es de 1 euro. El horario,
de viernes y sábado de 11 a 14 y de 17 a 19 horas. Domingos y festivos de 11 a
14 horas.
Desde la Capilla Luis de Lucena, subiendo la referida cuesta de San Miguel, nuestros personajes decidieron acercarse a visita exterior panorámica del palacio de los Condes de la Vega del Pozo y la capilla aneja de San Sebastián, que hoy pertenece al colegio de los Hermanos Maristas.
El estado actual del
palacio y de la capilla se debe a la intervención en finales del siglo XVIII,
que se reformó un antiguo edificio. El
conjunto muestra el estilo ecléctico y brillante de su autor. Destacan la torre
de la capilla y su portada, rematada por un magnífico relieve que representa el
martirio de San Sebastián.
En el edificio principal
se ha conservado el patio del antiguo edificio, construido en el siglo XVI, que
repite el modelo renacentista alcarreño.
Y así mismo, que se encontraba a pocos metros de distancia del monumento anterior, se acercaron a ver el magnífico edificio que representa La diputación Provincial de Guadalajara. Edificio construido en 1880/1882, habiendo tenido varias reformas considerables.
Finalizada la misión que
habían proyectado para aquel sábado, Octavio comentó a su nieto lo siguiente: -Cesar,
ahora te quiero dar la sorpresa de invitarte a comer en uno de los afamados
restaurantes de esta querida capital alcarreña, donde se degusta el delicioso
cordero o cabrito asado, lo que mejor desees, y los famosos biscochos
borrachos.
En la tarde anterior ya
había reservado mesa y así lo comentó a sus padres, sin que su nieto lo
supiera.
Eugenio
Madrid, Octubre 2024